Roma, 5 abr (Prensa Latina) El jefe del Departamento de Protección Civil (DPC) de Italia, Ángelo Borrelli, confirmó hoy la muerte de 525 personas con Covid-19 en las últimas 24 horas, para un total de 15 mil 887 desde el inicio de la epidemia.
En su conferencia de prensa habitual sobre la situación de la emergencia, Borrelli señaló que son 128 mil 948 los casos registrados hasta ahora y 21 mil 815 los que lograron superar la enfermedad.
Asimismo, informó que con los dos mil 274 recién contagiados reportados hoy ascendió a 91 mil 246 el número actual de pacientes, de los cuales 58 mil 320 permanecen en aislamiento domiciliario y 32 mil 926 hospitalizados, entre ellos tres mil 977 en terapia intensiva.
Acompañó en esta ocasión al jefe del DPC el presidente del Instituto Superior de Salud, Silvio Brusaferro, quien apuntó que después de alcanzar el pico, la epidemia comenzó a descender, incluso en cuanto a la cantidad de decesos, la cifra más baja desde el 19 de marzo último.
En tal sentido, dijo que aunque se comienza a pensar en pasar a la segunda fase en el enfrentamiento al nuevo coronavirus si esos datos se confirman, destacó la necesidad de monitorearlos constantemente.
A la nueva etapa de la emergencia se refirió antes el ministro de Salud, Roberto Speranza, quien advirtió que se avecinan meses difíciles en los cuales será necesario convivir con el agente patógeno.
En un comunicado, Speranza expresó que la situación es aún dramática y afirmó que «nuestra tarea es crear las condiciones para convivir con este virus» con vistas a retornar a la normalidad lo antes posible.
«No puedo dar una fecha. No quiero hacer anuncios», dijo el titular de Salud, quien criticó la «anuncitis» como «el mal de la política italiana» y recordó que el primer ministro, Giuseppe Conte, confirmó hasta el próximo 13 de abril la vigencia de las medidas restrictivas para enfrentar la epidemia.
Próximo a esa fecha -apuntó- veremos como estaremos y, en cualquier caso, se hará todo gradualmente, que nadie piense habrá un día en el cual se podrá decir «todo acabó».
En ese sentido, el funcionario explicó al diario Corriere della Sera que el gobierno trabaja en el diseño de una estrategia para la gestión de la segunda fase, la cual incluirá el distanciamiento social y uso de mascarillas, y el reforzamiento de los servicios de prevención y redes sanitarias locales.
Abordará también otros aspectos como, la creación de hospitales especializados en la Covid-19, pruebas masivas para detectar nuevos pacientes y el uso de una aplicación para controlar en tiempo real los desplazamientos de las personas infectadas a través de dispositivos móviles.